Eusko Lurra Fundazioaren hitzaldia tontorrean.
Sarrera:
Ongi etorri aldez aurretik Albertia 2020 egun honetara hurbildu zareten militante guztiei. Albertia berezia izango dugu aurtengoa, zeren eta hurrengo azaroaren 30ean 90 urte beteko baitira Eusko Abertzale Ekintza alderdia sortu zenetik, ezker independentistari horrela hasiera emanez.
6 urte beranduago, paraje hauetan, ehunka gudari ekintaleek bizitza galdu zuten faxismoaren kontra borrokatzen. Askotan hitz egin dugu Albertia Egunetan paraje hauetan 36ko neguan Txato Olaberriren batailoiaren borroka latzaz , non ehunka gudariek bizitza galdu zuten edo larriki zauritu zituzten. Edo justu tontor honetan Eusko Indarraren batailoiaren erresistentziaz, hegazkineri nazi eta italiarra zein tropa faxisten aurrean posizioa mantentzeko 37ko urtarrilean zehar. Beti izpiritu ekintzalea mantenduz, borroka eta jaia umore onez uztartuz. Haietako asko Donosti ingurukoak izanik, San Sebastian Eguneko danborrada fronte lerroan bertan ospatu baitzuten, lau egurrekin atondutako danborrak jotzen.
Agian miliziano sozialista batek , 36ko gaur bezalako abuztuko egun lainotsu batean, Izarraitz mendiko tontorrean eta aurreneko tropa faxistak gertu, Eusko Indarrako gudariei kantatzen aditu zien kopla berbera abesten. “Con el fusil en el monte, con el porrón en la taska, nunca pierden el humor, así son los de Acción vasca”.
Baina gaur, esan bezala, EAE-ANVren sorreraren 90 urte betetzen diren honetan, gudari ekintzale haien ideologia ekarri nahi dugu gogora. Independentzia eta sozialismoa. Sentimendu antikapitalista eta sozialista sakona eta Euskal Herria, Ipar eta hegoa, euskal estatuan batzeko deliberamendua. Beraiek 36ko azaroan, gerra betean Alderdiak argitaratutako manifestuan ondo adierazten zutenez:
”En el orden material hemos de ser, ya lo hemos dicho, revolucionarios entusiastas y decididos hasta deshacer todo el sistema capitalista, arrancar de raiz para que no vuelva a retoñar ese arbol del mal cuyo fruto es, y ha sido siempre, lo mismo en Euskadi que en todas las demas naciones, explotaciones inicuas de trabajadores, miserias colectivas y agresiones brutales como la que ahora estamos padeciendo. Queremos que los trabajadores desde el profesor al peón, lo sean todo, capital y trabajo, ordenadores y ejecutores, productores y consumidores, gobernantes y gobernados”.
Hemen Albertian ikusten ditugun bonba zulo guzti hauek, gure lurrean irekitako orbain hauek, garai ezberdinetako faxistek eta egungo neo-faxistek, daukaten mozorro demokratikoa jantzita daukatenik, independentzia eta sozialismoaren ideiak Euskal Herritik desagerrarazteko saiakera bortitzen lekuko dira. Baina 36ko gerra eta gero Ezker independentistako gudarien borroka jarraitutako militante eta bolondres ezberdinen belaunaldiak eta gure presentzia militante hemen, Albertia Egun honetan, haien porrotaren lekukoa da.
Independentzia eta sozialismoa. Gora Euskal Herria Askatuta!!!
Gora Eusko Gudariak!!!
Nekane Juradoren hitzaldia Eusko Lurra Fundazioaren izenean
Lagunok, egun on ta mila esker zuen etortzeagatik.
Una año más quiero citar en Albertia las frases de Mika Etchebere, una mujer
que defendió trincheras, llegando a capitana de las Brigadas Internacionales:
“Una vez más recordamos para saber quiénes somos;
una vez más buscamos las sendas trazadas por otros
para aprender de sus pasos y construir otro presente, otro futuro. Nos
miramos en el espejo del tiempo sabiendo que la única lucha perdida es la que se abandona y olvida”.
Eso es la esencia de la Memoria histórica que busca Eusko Lurra, el
desenterrar la memoria de las luchas, y de las ideas que las impulsaron.
¿Porqué era tan peligrosa la ideología de 1936 para ser aniquilada de raíz,
llenando cunetas fosas y trincheras?
Hablamos de la Memoria de dignidad, entrega y unidad de los defensores de
Albertia: gudaris de ANV, de las Juventudes Libertarias de la CNT, de las
Juventudes Socialistas de Bizkaia, junto a su fundadora, una mujer, Astrea
Barrios, que fue herida aquí en Albertia. Por ello hoy quiero hablar de las
defensoras de Albertia, que las hubo, y las de Peñas de Aia, y las de San
Marcial, mujeres. Mujeres en todas las trincheras de aquellos primeros meses
de la defensa autoorganizada de la Revolución Social, contra un golpe de
Estado Fascista de género y clase.
La Memoria Histórica también tiene género y sin la historia de la lucha obrera
y de clase de las mujeres estaremos contando y recuperando solo la mitad, o
menos, de las historias de lucha.
En 1936 se puso de manifiesto que las mujeres estaban en la vanguardia de
la lucha contra el poder y fueron perseguidas por ello. Con la pérdida de la
lucha revolucionaria en Euskal Herria, en julio de 1937, las supervivientes
sufrieron cárcel, exilio, o simplemente silencio y olvido. Su voz fue silenciada o
discriminada, incluso entre los desenterradores de la mal llamada Memoria
Histórica. Son mujeres que lucharon por su emancipación total como mujeres,
como obreras y como súbditas de un estado opresor y han recibido represión
y silencio en su propia tierra.
Es muy duro, pero es cierto. El legado de las mujeres proletarias vascas que
activamente participaron en la defensa de la Revolución Social de 1936 fue
eliminado de un plumazo de la historia de Euskal Herria, de tal forma que aun
en 2020 siguen siendo las grandes ausentes de cualquier foro de formación y
debate. El PNV ha recuperado mitificando la memoria de Emakume Abertzale Batza, (que no hicieron lucha ni feminista, ni de clase obrera) o más recientemente a las mujeres de la red Alava, la red de espionaje del partido; pero el papel y la contribución de las mujeres obreras, en su vanguardia libertarias, sigue siendo la gran asignatura pendiente de la Memoria de lucha de Euskal Herria.
Por ello desde Eusko Ekintza y Eusko Lurra queremos recordar en este frente
de Albertia a estas mujeres.
Los archivos históricos de Eusko Ekintza recogen la labor que muchas
afiliadas de ANV realizaron en Bizkaia, desde que con la victoria del frente
fascista de la CEDA las milicias populares comenzaron a armarse. Fueron
mujeres mayoritariamente las encargadas de la custodia de los almacenes y
“zulos” de las armas y de su distribución, además de enlaces de comunicación
y “sostenimiento material” de los milicianos. Destacándose que una parte de
los militantes de ANV estaban afiliados al sindicato CNT, En Gipuzkoa
destacaban, por su alta politización, la cerilleras de Irún, con más de 600
trabajadoras, y las cigarreras de Donostia que llegaron a alcanzar las 1000
trabajadoras.
Fueron la cerilleras de Irún las que en su huelga de agosto de 1934,
represaliadas por la Guardia de Asalto, llevaron el conflicto a las calles, con un
método y estrategia totalmente nuevos que se replicó en Irún dos meses
después, en la revolución de octubre de 1934, inaugurando con ello nuevos
métodos de luchas generales inspirados en la originalidad y eficacia de la
lucha de estas mujeres.
Este colectivo, con muchas otras mujeres, todas ellas obreras, se echó a la
calle el mismo 18 de julio. En un número nada despreciable se sumaron a la
defensa de la parte mas oriental de Gipuzkoa, hay constancia de ellas tanto
en Peñas de Aia como en la defensa de San Marcial.
El periódico FRENTE POPULAR DIARIO DE LA REPUBLICA, San
Sebastián, 9 de Agosto de 1936 trae una crónica del frente en Peñas de
Aia, donde recoge la presencia de mujeres “(..) Dejamos el camino
practicable y comenzamos la ascensión por un camino de cabras, que en
larga y fatigosa andadura conduce hacia las cimas nubosas de la Peña de
Aya, la más sólida de nuestras posiciones del Norte. Cada vez se oye más
próximo el estallido de la fusilería. De vez en vez, un “dun-dun” dramático
se estrella contra una roca de las alturas. En el camino alcanzamos a un
“convoy de a pie”, (..) Se transportan ametralladoras y municiones. La
muchacha va canturreando alegremente. Unos metros más arriba, la
muerte acecha. Pero ni la muerte misma puede amenguar la explosión
optimista de su juventud. (..) Formamos un grupo, tras los salientes
rocosos de la cumbre. El periodista norteamericano que nos acompaña detiene su atención en una muchachita morena, de pelo rizoso, que fraterniza con el resto de los combatientes. Está casi echada sobre la hierba rala de las alturas. Sonríe bajo la curiosidad del periodista yanqui, que intenta formular unas preguntas. Pero no hay tiempo. Un vigía anuncia que ha oído ruidos extraños en las estribaciones. Todos acudimos a la vanguardia de la posición. Por esta vez, la pluma deja paso al fusil. Junto a nosotros la muchachita de pelo rizoso esgrime una primorosa carabina y ajustando la culata en su hombro eleva el ojo derecho sobre el punto de mira”.
Crónica a solo tres semanas del Golpe de Estado, que citan con cierto
romanticismo a mujeres sin nombre, pero conocemos otros muchos nombres,
como el de Kasilda Hernáez, La miliciana, nacida en Zizurkil, miembro de
Mujeres Libres, y relato brevemente su lucha de ese momento, porque es la
lucha de muchas de sus compañeras.
A partir de 1931, Kasilda con 17 años, fue miembro de las Juventudes
Libertarias. Esta militancia la basó en los tres ejes centrales de las mujeres
libertarias de su tiempo: la lucha de género, de clase y contra el poder.
Comenzó a participar en las huelgas obreras de mujeres en San Sebastián,
fue encarcelada por hacer un llamamiento a la huelga general de agosto de
1931. La propia Kasilda relata: “ La primera vez que me detuvieron fue por
una huelguita que hicieron las compañeras de la fábrica de corchos…en las
penumbras de mis recuerdos aparecen las huelgas de los discos de
Columbia, de la casa inglesa Regal, la de las hojas de afeitar La Palma…la
huelga de las zapaterías. Hablo únicamente de huelgas de mujeres”
En la Revolución de Octubre de 1934, con solo 20 años de edad, fue
nuevamente detenida, por repartir propaganda y por posesión de explosivos.
Fue sometida a un Consejo de Guerra, encarcelada salió con la Amnistía de
febrero de 1936. El 19 de julio forma parte con muchas otras mujeres del
grupo que dirige el asalto a los cuarteles de Loiola en san Sebastían, y toman
el control y las armas, con las que se puede iniciar la defensa de Peñas de
Aia, y San Marcial.
En Donostia desde el día 20 de julio Kasilda y su compañero Likiniano,
inspirados en la Comuna de París de 1871, participan en la proclamación y
desarrollo de la Comuna de San Sebastian, que fue una autoorganización
popular de resistencia: defensa, abastecimiento, transporte, hospitales,
acogida de los que vienen huyendo de Nafarroa y Araba, todo tiene
responsables y se desarrolla con una unidad popular y de siglas sin
precedentes en la resistencia obrera vasca del siglo XX.
Las mujeres obreras, saben muy bien porqué están luchando y están muy
preparadas para ello. Saben que si no ganan esta Revolución el fascismo,además de la ejecución o la cárcel, ejercerá sobre ellas la más tremenda delas represiones: el olvido total, borrará sus nombres y su lucha. Porque ellas han desafiado el poder de Dios, del Estado y del patrón.
Por eso, cuando cae el frente de San Marcial en Irún, Kasilda como otras
tantas milicianas, cruza el Bidasoa y entra desde Francia a Cataluña para
seguir luchando en el frente de Aragón. En 1939 se exilia y participa
activamente en la Resistencia francesa al nazismo, y en la resistencia al
franquismo desarrollada por los mal llamados maquis, que son definitivamente
abatidos en 1960. Desde entonces, entre 1960-1970, ayuda desde su
residencia en Miarritz a los militantes de la nueva resistencia militar Euskadi
Ta Askatasuna.
En su tumba en Miarritz, solo una frase:;Andra! Zu zera bukatzen ez den sua!
En recuerdo a todas las mujeres de Albertia y de todas las trincheras
proclamo los versos de la catalana, María Mercè Marçal
“Al azar agradezco tres dones; haber nacido mujer, de clase obrera y de
nación oprimida, porque me ha hecho ser tres veces rebelde”
Y en MEMORIA de todas y todos los que nos han marcado
HISTORICAMENTE el camino de la lucha, nos reafirmamos en seguir su
senda: no aceptamos la guerra entre pueblos ni aceptamos la paz entre
clases.
Ez dugu ahaztuko¡. Gudari guztiei ohore guztia¡
