Discurso de Nekane jurado en el albertia eguna en nombre de la Heritar Batasuna.
Gracias a la familia ekintzale por invitarme a decir unas palabras en el 80 aniversario de la inmolación de tanto hombre bueno. Cuando me lo propusieron pensé que no era la más adecuada, pero enseguida me dí cuenta que concediéndome la palabra, concede la palabra a LAS MUJERES, las grandes silenciadas de la guerra y su represión posterior
Una mujer me dijo:
Las historias de nuestros compañeros e hijos han sido silenciadas.
Sus vidas, como sus huesos, han sido olvidadas.
Cuando muramos las que recordamos ¿Ya todo será olvido?
Murió la mujer amortajada de silencios, que alimentados de su cuerpo han brotado en palabras que ya no van a ser silenciadas.
En todas las cumbres dónde se abrió una trinchera, en todos los ríos que transformaron su caudal de agua en sangre,
EL SILENCIO SE ROMPE
un corazón colectivo se eleva.
Las mujeres hablan.